LA MÚSICA

“La música es aquella de las bellas artes que se ocupa de la combinación de sonidos, buscando la belleza en la forma y la expresión de emociones.”Diccionario Inglés Oxford.
“La música es aquella de las bellas artes que utiliza el fenómeno del sonido para propósitos de la poesía.” Enciclopedia Británica.
La actividad musical en una persona implica el desarrollo de habilidades cognitivas, emocionales, psicomotoras y sociales.
A nivel cognitivo estimula todas las funciones psícointelectivas (memoria, atención, percepción, asociación, pensamiento, etc.). Esta disciplina artística mejora el aprendizaje de la lectura, la lengua, las matemáticas y el rendimiento académico en general potenciando además otras áreas del desarrollo humano. Básicamente el niño pequeño alcanza el aprendizaje a partir de la imitación. La imitación ayuda a desarrollar en el alumno: la observación consciente, la capacidad de atención y concentración, la asimilación-comprensión, la retención y la capacidad de evocación.
A nivel emocional, el goce de la música y las producciones sonoras que logren los niños aumentarán significativamente la confianza en sí mismos lo cual tiene una consecuencia directa en su personalidad.
Respecto de la psicomotricidad, el ritmo y la música ayudan muy directamente al desarrollo de logros psicomotrices: La atención del niño se dirige al tema inducido por el ritmo o la canción y, por tanto, la realización de movimientos o percusiones corporales se facilitan en gran medida. Por lo tanto, está relacionada con el aprendizaje, la capacidad de transferir experiencias motrices anteriores a situaciones nuevas.
Por otro lado, las habilidades sociales llevan al aprendizaje a una convivencia basada en el respeto por el otro, escuchándolo, aceptándolo y sintiendo que uno necesita del otro y todos son necesarios, siendo la música incluyente y constructiva.